Forma fisica
Muchos de los problemas de los perros en la media veda, empiezan por la falta de fondo fisico. Cuando la temporada general termina, muchos de los cazadores no se acuerdan de sus canes y los tienen recluidos en la soledad del canil, solo se acuerdan de ellos en las vísperas de la media veda. Un perro así, llegará el dia del desvede sin forma fisica suficiente para afrontar la caza en epoca estival y unido esto a las altas temperaturas con las que se caza en la media veda, tendremos en pocos minutos, a nuestro auxiliares asfixiados a nuestros pies o buscando la sombra más cercana. Por lo tanto vamos a quitarnos esa pereza que se a instalado en nosotros desde el final de la general y sacaremos regularmente a nuestros ayudantes caninos, ya que sin ellos bien poco podremos hacer en la caza de las pequeñas africanas viajeras.
Estamos de acuerdo que hay razas que aguantan más que otras las temperaturas del verano, pero sin una forma fisica y fondo adecuados, no lograremos que ni una raza ni otra aguanten y cacen con soltura en la media veda. Es por tanto hora que vayamos sacando a nuestros perros a hacer ejercicio regularmente. El perro que sale habitualmente al monte, aprende a dosificarse, y por lo tanto no corre alocadamente para caer pronto en el agotamiento. Con una hora diaria y siempre en zonas permitidas para ello, en teoria será suficiente. Comenzaremos con la fresca del amanecer y del atardecer para ir poco a poco haciendolo en las horas centrales del día, siempre teniendo agua cerca para refrescar a los perros.
Calor y codornices
Quedan muy pocos meses para que comience la esperada media veda. Creo que muchos de vosotros estaréis ansiosos pensando en las buenas faenas que os van ha hacer vuestros perros con las codornices. Muchas veces, los primeros días de caza se han convertido en un autentico suplicio, ya que los perros parecían haber perdido todas las dotes cinegéticas. Pero como todo, esto tiene sus motivos, por lo que vamos ha intentar evitar esas desagradables experiencias que ningún cazador querrá volver a sufrir de nuevo.
Para ello vamos ha ir analizando cuáles suelen ser las mayores dificultades que nos encontramos en la caza de la codorniz. A la mayoría de los codorniceros nos gusta que los perros vayan a un ritmo pausado pero constante, para que no se dejen ninguna emanación y aguanten perfectamente toda la jornada. El mayor enemigo en la media veda son las altas temperaturas con las que cazamos y la falta de agua en el cazadero. Si en el cazadero no tenemos suficiente agua la llevaremos con nosotros y le iremos dando de cuando en cuando a los perros y si tenemos la oportunidad los llevaremos a alguna fuente o charca para que se refresquen.
Las codornices, por su tamaño y por la falta de humedad en el ambiente dejan muy pocas emanaciones y aún más si todavía las codornices no han estado andando previamente por la zona y no han dejado rastro alguno. Principalmente por estos motivo las muestras son a menor distancia y son menos espectaculares. Durante las primeras horas del día, son frecuentes las muestras continuas, pero a partir de las doce del medio día, cuando el sol está en todo lo alto, las codornices desaparecen como si se las hubiera tragado la tierra.
Es entonces cuando dejaremos de cazar y descansaremos hasta las seis o las siete de la tarde, cuando el sol ya no es tan fuerte. Son a estas horas cuando las africanas vuelven a dejar rastros frescos en sus desplazamientos para alimentarse, que unido a las temperaturas más suaves tendremos unas horas para terminar de redondear la percha de codornices. Sigue….